Cuando llega el momento de elegir un pienso para gatos

Cuando llega el momento de elegir un pienso para gatos hay varias cosas que debemos tener en cuenta y el precio no es una de las cosas que deben guiar nuestra compra.

Ciertas comidas para gatos consiguen calmar el apetito del gato, pero no significa que le estén proporcionando a nuestras mascotas los nutrientes suficientes para una buena salud en su día  a día.

Un gato, según su tamaño, estilo de vida y edad necesitará una comida de gatos determinada. Si es un gato de interior, posiblemente tenga más tendencia a engordar que otros gatos que tienen acceso al exterior de una casa y más amplitud de movimiento. Los gatos de exterior hacen más ejercicio, por lo que su capacidad para engordar disminuye.  

Por esta razón hay que diferenciar el tipo de vida que lleva nuestro gato. Si es un gato al que le gusta estar tumbado todo el día, tendremos que darle una comida baja en grasa para que no termine siendo como una bola de pelo. Los gatos obesos suelen hacer mucha gracia, pero cuando esa obesidad conlleva a problemas de salud, deja de hacer gracia. El gato sufre y quizá nuestro bolsillo se vea resentido si tenemos que comenzar con visitas al veterinario por los problemas que la obesidad le está causando a nuestro gato.

La comida que elijamos para nuestro gato debe proporcionarle los nutrientes que necesita. Ni más ni menos. El veterinario es quien mejor te puede aconsejar el tipo de comida que necesita tu gato, pero eres tú quien observa su comportamiento a diario, si es activo, si es perezoso…

Otra cosa a tener en cuenta es el gusto caprichoso que tienen muchos gatos. Da igual que le compres el pienso más caro del mercado, si el gato dice que no, es que no. Y no se lo come por mucho que se la pongas durante días seguidos en su plato. Antes hace una huelga de hambre que comer un pienso que no le es apetecible. Averiguar qué es lo que no le gusta exactamente no es sencillo. Puede que no le guste el olor, puede ser el sabor o incluso la forma de la croqueta. Hay que ir probando, tanto con comida seca como con comida húmeda.

Tener un gato trae muchas satisfacciones, pero saber elegirle la comida adecuada puede conllevar algún que otro quebradero de cabeza.